Coincidiendo con el descuento que tiene hoy Dishonored en xbox live, que lo deja en 9,89 €, aprovechamos para hacer un microanálisis de esta maravilla, que ha quedado algo eclipsada con el paso del tiempo y la cantidad de joyas que nos deja el final de generación.
Diseñado por Arkane, creadores del fantástico Dark Messiah of Myth and Magic, y aprovechando muchas de las ideas que se les quedaron en el tintero con la cancelación de The Crossing, nos pone en la piel de Corvo, un duro guardaespaldas que se verá envuelto en una trama para derrocar al gobierno de Dunwall. No voy a explicar más porque supongo que a éstas alturas todos sabréis de qué va el juego, y los que no corred a comprarlo, porque se trata de uno de los mejores juegos de esta generación que ya termina, eso si, no esperéis un guión sorprendente, porque el juego no va de eso.
Dishonored es un juego como los de antes, mientras juegas te das cuenta que no está hecho con prisas, que no está pensado para gustar a todo el mundo. Es un juego muy complejo, donde todo está cuidado hasta el más mínimo detalle. En su periplo, Corvo Attano tendrá que hacer frente a el ejército de Dunwall, y estará en tu mano decidir como hacerlo, es un juego tan bien diseñado que te da la oportunidad de decidir tu mismo, y no te soborna con una falsa sensación de libertad, sino que te permite elegir. Puedes enfrentarte a las fuerzas de seguridad cara a cara, e ir mejorando tus habilidades de combate si te gusta ese estilo de juego; si no, puedes acabar con ellos desde las sombras, mejorando tus habilidades de infiltración, o incluso esquivarlos, mantenerte oculto, encaramarte a los tejados de la ciudad, ocultarte en pisos vacíos, pocos juegos dan tantas posibilidades. Eso si, tus actos tienen consecuencias, Dunwall está asediada por una misteriosa plaga, si optas por dejar un reguero de cadáveres a tu paso, la plaga y las ratas que la transmiten se irán haciendo más y más fuertes y numerosas. También hay multitud de misiones secundarias, en las que tendrás que tomar diversidad de decisiones, o simplemente pasar de largo e ignorarlas, normalmente dejando atrás alguna mejora para tu personaje.
Artísticamente es bastante resultón, contando con Viktor Antonov, como diseñador, lo que le da cierto aire steampunk. Mezcla los vestuarios y emplazamientos de una época victoriana, con una tecnología y engendros mecánicos muy cercanos a el propio Half Life 2. Los personajes tienen un aire cartoon, que puede gustar más o menos, pero al menos hará envejecer bien al juego, que se aleja del hiperrealismo. Escenarios decadentes y callejones oscuros y llenos de basura, contrastan con palacios o prostíbulos llenos de orfebrería. Y el omnipresente aceite de ballena, que da vida a la maquinaria que usa el ejército al mismo tiempo que ensucia las calles y los cielos de Dunwall. Todo ello movido por la última versión del Unreal Engine 3, que aunque es un motor veterano, da muy buenos resultados moviendo e iluminando el mundo creado por Arkane.
Pero lo que realmente distingue a Dishonored de los demás es la jugabilidad. Arkane apuesta por una jugabilidad clásica, mezclándolo con un desarrollo mas actual al estilo sandbox. Diferentes personajes que vamos conociendo nos ofrecen hacer diversas misiones, pero estas casi serán niveles clásicos, cerrados y cuidados hasta el último detalle. Siempre habrá varias formas de hacer la misión, diversas armas y formas de eliminar a los objetivos y varios caminos para hacerlo, pero nunca tendremos la sensación de estar haciendolo mal, o haber conseguido engañar al juego. Y eso es todo un logro tienendo en cuenta que unos de los poderes, el guiño, que será probablemente el que más usaremos nos permite teletransportanos de un sitio a otro, por ejemplo al tejado de un edificio o encima de una farola, pero incluso así nunca llegaremos a un muro invisible, o a una pared a la que no podamos alcanzar. Quizás en algunos aspectos, como las pantallas de carga entre misiones o un poco el estilo de juego pueda parecer algo anticuado, en otros aspectos agradeceremos este hecho, ya que como los juegos a los que jugabamos hace años, se nota que está cuidado hasta el extremo, que nada se ha dejado la azar o se ha hecho con dejadez, y una vez lo terminemos, tendremos ganas de volver a empezarlo, como nos pasaba antes, cuando no se pretendía vendernos una nueva entrega de la saga cada año.
En definitiva un gran juego, que asegura horas y horas de diversión y que a dia de hoy podemos encontrar a muy buen precio en plataformas digitales, y que no debéis dejar de probar si os gustan las cosas bien hechas con coherencia y que os dejará un muy buen sabor de boca.
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